El jefe comunal señaló que el sector vive una profunda crisis como consecuencia de la caída de los precios internacionales y el aumento de las tarifas de la electricidad.
El Intendente de Pomán, Francisco Gordillo, señaló que en los últimos 4 ó 5 meses "hay más de 60 trabajadores, que han quedado sin trabajo en el sector olivícola. Es mucho, son 60 familias, y en comunidades chicas como la nuestra la verdad que eso tiene un impacto mayor.
Manifestó que hace mucho años que no vivían lo que hoy están viviendo, ya que "hay un nivel de desocupación importante”. Explicó que "hace un poco más de 20 años, en Pomán teníamos la mitad de la población, y en el crecimiento demográfico que hubo tuvo mucho que ver la explosión de los diferimientos impositivos y las plantaciones de olivo”.
Mencionó como causas de la crisis la caída de los precios internacionales y el aumento de la tarifa de la electricidad, que se necesita para bombear el agua subterránea, entre otros factores.
Gordillo manifestó que hay fábricas que elaboran aceituna de mesa que "están paralizadas” y que "hay empresa que han hecho inversiones y después han tenido que sacar la mitad de los olivos porque no son rentables”. "Damos gracias a Dios que las plantas no tienen rueda porque si tuvieran ruedas ya se la hubiesen llevado”, ironizó
Respecto de las finanzas municipales, Gordillo reconoció una baja importante de la coparticipación, que compromete el funcionamiento del municipio.
ELANCASTI
