ABUSO SEXUAL - Dilatan la causa con oposiciones

Por el presunto abuso contra un adolescente, el juez decidirá.

La defensa pidió la nulidad de uno de los hechos. La querella se opuso a una nueva toma de testimonio

La desición sobre la continuidad de la causa estará en manos del juez Cecenarro

 Los abogados de la defensa y la querella en la causa que se sigue por el presunto abuso sexual a un adolescente por parte de un sacerdote en Andalgalá, presentaron distintas oposiciones al decreto y a medidas ordenadas por la fiscal. Ahora el juez de Control de Garantías decidirá los pasos a seguir.

El abogado Luciano Rojas, quien representa al sacerdote Rasgido, había presentado semanas pasadas la nulidad de uno de los hechos de abuso por el que está imputado su defendido.
Puntualmente el letrado indicaba que en el decreto de determinación del hecho, en uno de los casos de abuso por el que acusan a Rasgido no se detalla y especifica fehacientemente la parroquia en donde habría ocurrido, tal como lo señalaría el adolescente. Es que según lo señaló el abogado en la localidad de Aconquija -en donde habría ocurrido el ultraje- existirían varias parroquias y la presunta víctima no indicaría en cuál de éstas.
La fiscal Marta Nieva habría analizado la presentación y ordenado al personal policial que se constate la cantidad de parroquias existentes. Además habría solicitado tomar un nuevo testimonio a la víctima para que indique este detalle: en qué parroquia habría sucedido el abuso.
Por su parte el abogado de la querella, Enrique Lilljedahl, se opuso a tal medida y presentó una oposición. Ahora el juez de Control de Garantías deberá decidir la presentación al finalizar la feria judicial.

El hecho
El hecho fue denunciado en marzo pasado por la madre del adolescente, quien señaló que fue víctima de ultrajes sexuales por parte del sacerdote.
Dos meses después recién la Justicia imputó al cura de los delitos de "abuso sexual simple", "abuso sexual simple en grado de tentativa" y "abuso sexual con acceso carnal" (dos hechos), todos calificados por su condición de sacerdote de la supuesta víctima.
Tras la indagatoria, la fiscal de ese momento ordenó la libertad del acusado pero con restricciones.